Esifar, especialista en nutrición de ponedoras, trabaja junto a Granja Jeica desde hace 13 años como su proveedor responsable nutricional para parte de su producción.Granja Jeica es una granja modelo y una empresa familiar que mantiene sus costumbres desde varias generaciones con excelencia en producción y exigencia en la calidad de sus productos.
Esifar también brinda asesoramiento y coordinación con los demás proveedores de Granja Jeica. Implementando además, estadísticas para comparar la eficiencia por lotes. Actualmente, y a modo de prueba, están utilizando Pidolín para mejorar la cáscara.
Jorge Noble, técnico de Esifar, es su nexo en nutrición y es el responsable de obtener las muestras, remitirlas a laboratorio y realizar las formulaciones.
“Desde Esifar se ayuda mucho a Jeica en la normalización de los registros nutricionales con la finalidad de acompañarlos en el proceso de certificación de calidad. También se los ayudó en las auditorías sobre bienestar animal en toda la planta de alimentos, en cómo llega el alimento a los animales”, informa Noble.
En 2005 Granja Jeica contaba con 2 galpones de 15mil animales cada uno. En 2010, con el asesoramiento de Esifar y la tecnificación de los sistemas de jaulas duplicó la densidad de animales. Hoy, con la posterior construcción de un nuevo galpón, alcanza las 100.000 gallinas ponedoras y produce 1 millón de huevos por mes con una planta totalmente tecnificada. Además, Granja Jeica incorporó el sistema Pro Manager para el manejo de stocks y ya trabaja en un manual de procedimientos con el objetivo de lograr la certificación en calidad ISO 9001.
Para Javier Pernicone, uno de sus dueños y responsable de la producción, “La empresa familiar tiene sus pros y sus contras. La flexibilidad es un punto a favor, mientras que el desorden que genera la flexibilidad es justamente un punto a resolver. Falta la estructura. A la industria actual la veo funcionando bien, pero en el futuro corto plazo no la veo creciendo mucho. La salida puede estar por el mercado externo o en la innovación del producto.”
El desafío para los productores de huevos es la eficiencia: ver cómo se desarrollan los sistemas productivos (gallinas libres de jaula, etc.), el ahorro de costos y la épica desmesurada contra el precio. Pero la verdadera batalla radica en el producto. El reto es como diferenciar el huevo: huevos orgánicos o enriquecidos con Omega 3 o selenio, etc.
Por eso la alianza de Granja Jeica con Esifar, para mejorar el rendimiento de la producción y lograr productos de calidad internacional, es estratégica y fundamental.